Bienvenido a Make/Buy/Zhuzh, una serie en la que planeamos una cena con tres componentes: algo que preparas desde cero, algo que compras listo para consumir y algo con lo que complementas para finalizar.
Debido a que soy exeditora de Bon Appétit, la gente espera mucho cuando viene a cenar a mi casa.Pero la cosa es que realmente no me gusta cocinar.Me gusta ser anfitriona y me gusta comer.Pero como me gusta improvisar, encuentro que la organización y el tiempo necesarios para planear un menú y pasar el día cortando y mezclando es demasiado para mi cerebro acalorado y somnoliento.
Entonces, ¿cuál es mi plan perezoso de entretenimiento al aire libre cuando necesito un descanso de las hamburguesas a la parrilla?Un festín italiano interactivo con una barra de spritz DIY y la mejor pizza congelada del mundo, por supuesto.
Hacer: puede que no me guste cocinar, pero sí me encanta componer, es decir, echar un montón de cosas ricas juntas en un tazón y darlo por hecho.Y para eso, nada mejor que una ensalada italiana XL (¡tiene pimientos de plátano!¡Tiene pastrami!¡Es básicamente una comida en sí misma!).
Este, para mí, es el mejor platillo para alimentar a una multitud cuando afuera hace 87 grados y el cuerpo, maltratado por las moscas y los bichos, pide a gritos verduras... pero también un poco de carne procesada.
Esta es mi estrategia, que puedes seguir al pie de la letra o simplemente usarla como inspiración: mezcla 1 taza de aceite de oliva, ½ taza de vinagre de vino tinto, 2 cucharadas de mayonesa, 1 cucharada de condimento italiano y 2 cucharaditas de ajo picado (seco o fresco).Ese es tu aderezo.Luego, corta dos lechugas iceberg y agrega 8 oz de salami rebanado (cortado en tiras pequeñas), 8 oz de mozzarella rallada, 1 cebolla (de cualquier tipo, en rodajas finas), 1 tomate (de cualquier tipo, cortado en trozos pequeños), 2 tazas de aceitunas sin hueso (de cualquier tipo, pero prefiero las castelvetranos, y siéntete libre de cortarlas en rodajas para que se integren bien), ½ frasco de chiles banana en escabeche (escurridos y picados) y algunos crutones (hazlos tú mismo con pan duro cortado en cubos, aceitado y horneado, o compra una bolsa, ¡nadie te juzga!).Mezcla todo y ¡voilá!La ensalada italiana perfecta.Rinde alrededor de ocho porciones, el tamaño ideal para una cena.
Compra: la pizza Talia di Napoli, hecha a mano en Nápoles y enviada a los EE. UU., es la única pizza congelada que he probado y, de hecho, la he confundido con la pizza de un restaurante.Es mucho mejor que otras pizzas congeladas, así que merece su espacio en el congelador.Soy un fanática de los sabores más simples: doble queso, margherita o el clásico pastel de mozzarella, que se prepara con agua napolitana de origen local (como el agua del grifo de la ciudad de Nueva York para los bagels, se dice que es fundamental para la consistencia de la masa), queso y albahaca fresca de Campania y aceite de oliva de Puglia.Las pizzas se congelan instantáneamente segundos después de salir del horno de ladrillos para preservar su sabor y textura.Pon una de estas en el horno durante 12 minutos a 425 grados, luego diles a tus invitados que la preparaste desde cero.Puedes pedirlas para entrega en DoorDash en DashMart y Sprouts, entre otras tiendas de comestibles.
Zhuzh: un Aperol Spritz es el mejor cóctel de verano, no me hace falta que lo diga.¿Pero sabes qué es aún mejor?Una barra de spritz DIY con ingredientes brillantes, licores y guarniciones para mezclar y combinar.
Cocchi Americano, Campari, Aperol, algunos pét-nats divertidos y hierbas frescas como la albahaca y menta (guárdalas en un vaso de agua fría como un ramo para darle frescura) son un buen punto de partida, pero puedes y debes ponerte creativo.¿Bayas y uvas congeladas en lugar de cubitos de hielo?Sí.¿Ositos de goma?¿Por qué no?
Me gusta disponer una variedad de vasos de vidrio que no coinciden, algunos medidores, algunas latas de agua con gas y un cartel con las proporciones ideales: 3 partes de vino espumoso, 2 partes de licor y 1 parte de agua con gas.Luego, coloca una hielera con hielo al lado de la barra, pídeles a los invitados que traigan una botella de su bebida espumosa o licor favorito (vermú, crema de cassis, etc.) y deja que el zhuzh se multiplique con cada nueva llegada, y con cero responsabilidades de anfitrión.
CRÉDITO FOTOGRÁFICO:
Fotografía: Paul Quitoriano
Estilista: Mary Rupp
Dirección de arte: Sarah Ceniceros
