Si bien el Día de Acción de Gracias puede ser un asunto familiar formal, “Friendsgiving” es un momento para relajarse y celebrar con las personas que mejor te conocen. Haz que el tuyo sea inolvidable con nuestra guía para organizar Friendsgiving al aire libre, con velas que titilan, pavo asado y una receta fácil de una galette de manzana para deleitar a todos. Sigue leyendo para obtener nuestros mejores consejos sobre cómo encarar la reunión de este año, desde la comida y la decoración hasta el ambiente acogedor en general.
El ambiente
“Friendsgiving” cae en las últimas preciadas semanas de clima excelente para realizar actividades de ocio al aire libre. Para un evento memorable, considera la posibilidad de invertir en una atracción principal, como una chimenea, que también haga de lugar central al aire libre. Coloca calabazas miniatura a su alrededor, una cantidad considerable de mantas reversibles aptas para exterior y crisantemos de todos los colores para generar un aspecto otoñal. En caso de clima inclemente, busca una carpa autoarmable con anticipación; puedes decorarla con algunos adornos adicionales, como focos LED.
La iluminación
Hablando de iluminación, usa candelabros aptos para exterior para que la luz de la tarde y la noche de tu “Friendsgiving” sea más tenue. Puedes agregar velas reales o a batería para crear un ambiente cálido y acogedor.
La comida
Y no te olvides de la estrella del espectáculo: la comida. A diferencia del Día de Acción de Gracias, “Friendsgiving” se trata de relajarse, así que tu menú debe ser tanto fácil de ejecutar como tentador. Adoptar la parrilla es una forma de hacer de la cena un asunto más fácil de abordar. Al ser el organizador, no tendrás que excusarte constantemente para entrar a verificar las temperaturas. Este es nuestro menú:
Plato principal: si el objetivo es “relajarse”, es posible que te veas tentado a omitir el pavo. En lugar de renunciar a él por completo, considera la posibilidad de cocinar un pavo más pequeño, de 12 libras, en salmuera, cortado mariposa y colocado directamente en la parrilla. Comienza por cocinar el pavo (que debe estar seco y fuera del refrigerador, al menos, 30 minutos antes de asarlo) a aproximadamente 450 °F en una sección moderadamente caliente de la parrilla, con la pechuga hacia arriba, durante 30 minutos. Baja el fuego a 350 °F y cocina hasta que la temperatura interna sea de 150 °F en la parte más gruesa de la pechuga, lo que debe tardar entre 70 y 80 minutos.
Guarniciones: acompaña tu relajado plato principal con un también sencillo relleno de pan: 1 baguette en trozos, 1 cucharada de romero y otra de salvia frescos; ½ taza de caldo de pollo; 1 taza de champiñones, otra de cebollas y otra de apio salteados; una nuez de mantequilla. Puedes hornear el relleno antes de que lleguen los invitados y recalentarlo en una fuente en la parrilla a 350 °F mientras se asa el pavo.
Postres: ¿qué sería de una fiesta con temática otoñal sin una oda de la verdura dulce favorita de todos, la batata? Para esta particular fiesta al aire libre, las asaremos (las batatas ya batidas van a un ramequín resistente al calor y se hornean durante 30 a 40 minutos hasta que estén calientes en el centro). Para un toque final interactivo, cúbrelas con malvaviscos gigantes y reparte algunas antorchas a tus amigos para ver quién gana el premio al mejor brûlée. Completa con algo único: una galette de manzana asada y ligeramente ahumada que es fácil de hacer e incluso más fácil de enamorarse (incluimos la receta al final).
La sobremesa
Una vez que termine la cena, redobla el ambiente acogedor con vasos térmicos para chocolate caliente junto al fuego, palitos para asar más malvaviscos y calentadores de manos por si las temperaturas comienzan a bajar al final de la noche.
Los obsequios
Cuando sea hora de irse, no solo despidas a los invitados con las sobras. Los recipientes vintage rescatados de ventas de garaje, mercados de pulgas y tiendas de segunda mano son obsequios perfectos para fiestas. Es posible que una porción de galette de manzana no dure toda la vida, pero ese adorno de moda de la década de 1980 que rescataste del patio del vecino, definitivamente sí. Es una forma de garantizar que nunca olvidarán este “Friendsgiving”.
Galette de manzana de “Friendsgiving”
Para la masa
1¾ tazas más 2 cucharadas de harina común
¼ de cucharada de sal kosher
15 cucharadas de mantequilla fría sin sal, cortada en cubos de ½ pulgada
6-10 cucharadas de agua helada
Para el relleno
4 manzanas Honeycrisp (aproximadamente 1¾ libras), peladas, cortadas a la mitad, sin carozo y cortadas en rodajas de ¼ pulgada
¼ de taza de azúcar granulada
¼ de taza de azúcar rubia
1 cucharada de de jugo de limón recién exprimido
1 cucharada de nuez moscada recién molida
1 cucharada de extracto de vainilla
½ cucharada de sal kosher
1 cucharada de manteca fría sin sal en cubos
Para el armado
1 huevo grande
¼ de taza de azúcar turbinado
Helado de vainilla para servir, si lo deseas
Instrucciones
Comienza por la masa: en el tazón de un procesador de alimentos, mezcla la harina y la sal, y procesa hasta que la mezcla esté homogénea.
Agrega toda la mantequilla de una vez y sigue procesando hasta que se formen trozos del tamaño de un guisante grande. Con el procesador encendido, agrega gradualmente el agua helada por el tubo de alimentación hasta que se formen terrones húmedos grandes.
Reúne la masa y forma una bola, envuelve en film transparente y aplasta hasta formar un disco grande. Refrigera la masa durante, al menos, 30 minutos o hasta por 24 horas.
Mientras tanto, prepara el relleno: mezcla las manzanas, ambos azúcares, el jugo de limón, la nuez moscada, la vainilla y la sal en un tazón grande. Reserva en el refrigerador durante 15 minutos para que se mezclen los sabores.
Precalienta una parrilla a gas, a carbón o de virutas a fuego medio o, si tu parrilla permite una configuración de temperatura específica, a 400 °F.
Desenvuelve la masa y pásala a una superficie fría y enharinada. Coloca Silpat o un trozo de papel para repostería sobre una bandeja para horno.
Estira la masa hasta que tenga un grosor de ⅜ de pulgada y un diámetro de 13 a 14 pulgadas, y pasa a una bandeja para horno.
Acomoda la mezcla de las manzanas en una capa pareja en el centro de la masa, a unas 2 pulgadas del borde. Dobla la masa que queda colgando sobre el relleno y forma pliegues cada unas pocas pulgadas. Coloca los cubos de mantequilla dispersos sobre la mezcla de manzanas expuesta.
Arma la galette: mezcla el huevo y una cucharada de agua, y pincela la parte superior de la masa, asegurándote de llegar debajo de los pliegues del repulgue. Espolvorea el azúcar turbinado en la parte superior de la masa y el relleno. Coloca la galette descubierta en el congelador durante 15 minutos.
Retira la galette del congelador. Asa durante aproximadamente una hora y 10 minutos o hasta que las manzanas se puedan pinchar fácilmente con un cuchillo filoso y larguen jugos, controlando la galette con regularidad para evitar que se dore en exceso (si parece que la galette se está dorando demasiado, cubre los bordes con papel de aluminio).
Retira la galette de la parrilla y pasa a una rejilla de alambre. Deja enfriar durante aproximadamente 10 minutos, luego pasa un cuchillo o una espátula debajo de los bordes del Silpat para despegarlo de la bandeja. Con cuidado, pasa la galette a una base para pasteles y sirve tibia o a temperatura ambiente, con helado si lo deseas.
CRÉDITO DE LA FOTO:
Fotografía: Paul Quitoriano
Estilismo de la comida: Lena Abraham
Dirección de arte: Sarah Ceniceros Gómez
