Cocina

¿El secreto para obtener calabacín con mucho sabor? Caramelizarlo.

Anulará todo lo que piensas que sabes sobre la ligeramente apática verdura.

11/1/2024
7 minutos de lectura
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Definitivamente, el calabacín caramelizado es una de mis recetas favoritas. ¿Dices calabacín? ¿Realmente calabacín? Sí. Sé que el calabacín no es conocido por ser una verdura interesante. Nadie lo menciona como su verdura favorita (los buenos expertos en RR. PP. se inclinaron por las coles de Bruselas y el coliflor). Pero el humilde calabacín verde (disponible durante todo el año en la mayoría de los mercados), por lo general, se desestima por ser aguado o insípido. Y las personas no se equivocan. Pero, de hecho, puedes aprovechar las cualidades subestimadas del calabacín para lograr algo delicioso y apetecible. 

En lugar de temerle al calabacín pastoso, lo adopté (la acuosidad sirve para impartir la textura de una salsa. El secreto de mi calabacín caramelizado de 20 minutos es incluir la mayor cantidad de sabor posible en cada paso. Primero, caramelizo ligeramente los chalotes como una base de sabor y, luego, cocino el calabacín en un poco de caldo, sal y ajo. Te quedará un calabacín de otro planeta, increíblemente tierno, gelatinoso y con una textura similar a la de una salsa. También lo he hecho con una mezcla de calabacín y calabacita amarilla, y estoy contemplando la posibilidad de agregar berenjena a la mezcla para darle un toque al estilo ratatouille gelatinosa.

La deliciosa diversión no termina aquí. Este calabacín puede cambiar su forma por completo y se puede convertir de una simple guarnición en una comida completa. Estas son algunas de mis formas favoritas:

  • Transfórmalo en una salsa para pastas: mezcla un poco de pasta cocida con el calabacín, agrega parmesano rallado y más aceite de oliva si es necesario.

  • Coloca en un procesador de alimentos o una licuadora para hacer un suave aderezo vegano o para untar. Agregar requesón u otro queso cremoso a la mezcla no le haría mal a nadie…

  • ¿Necesitas una base vegana para pizza? Agrégalo como “salsa” o úsalo para cubrir una pizza con salsa blanca o roja antes de embadurnarla con queso.

  • Mézclalo en cualquier tipo de sopa. Una de mis sopas sencillas favoritas es una cremosa sopa de huevo y calabacín con pollo asado, croquetas de pescado y mucha espinaca mezclada.

  • Agrega a los huevos revueltos o a un omelet para el desayuno, el almuerzo o la cena.

  • Unta sobre un sándwich, cubre un crostini o agrégalo a una pita o un wrap.

¿Estás listo para probarlo? ¡Aquí está la receta!

Calabacín caramelizado con chalotes

Rinde de 4 a 6 porciones

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Ingredientes

  • 1 cucharada de mantequilla salada

  • 1 cucharada de aceite de oliva

  • 2 chalotes grandes (de aproximadamente 3” de alto), cortados a la mitad, a lo largo, y finamente picados

  • 2 calabacines grandes, cortados a la mitad, a lo largo, y en media lunas

  • 1 cucharadita de sal kosher

  • ¼ de taza de caldo de pollo o verdura, ¡pero también puedes usar agua! Solo agrega más sal. 

  • 4 dientes de ajo, finamente picados

  • ½ cucharadita de pimienta negra molida

  • 3 cebolletas, solo las partes de color verde oscuro, finamente picadas o cortadas

Indicaciones

Tiempo de preparación: 5 minutos

Tiempo de cocción: 15 minutos

Tiempo total: 20 minutos

  1. En una sartén grande a fuego moderado, agrega el aceite de oliva y deja que la mantequilla se derrita. Agrega los chalotes y déjalos cocinar durante 8 a 10 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que estén tiernos y comiencen a dorarse. 

  2. Agrega el calabacín, revuelve para integrar, luego agrega la sal y el caldo. Lleva a hervor y cubre; deja cocinar ininterrumpidamente durante 8 minutos. Destapa, agrega el ajo y revuelve; luego, vuelve a tapar. Deja cocinar durante 4 minutos, luego destapa y sube el fuego a moderado-fuerte. Revolviendo con frecuencia, cocina hasta que el líquido se evapore por completo y el calabacín tenga una textura gelatinosa, durante aproximadamente 2 o 3 minutos.

  3. Agrega la pimienta negra al final y luego esparce sobre las cebolletas. Puede servirse caliente, a temperatura ambiente o incluso frío. Guarda en un recipiente hermético en el refrigerador durante, como máximo, una semana.

CRÉDITO DE LA FOTO:

  • Fotografía: Paul Quitoriano

  • Estilismo de la comida: César Aldrete

  • Dirección de arte: Sarah Ceniceros Gómez